Ricardo López Murphy hace tiempo que bombardea semanalmente al gobierno porteño. En esta entrevista con Página/12 se muestra más duro que nunca con su ex socio Mauricio Macri. En sus palabras se nota que se concentra en la ciudad. No lo dirá, pero su futuro electoral parece apuntar hacia Bolívar 1. El Bulldog considera que en el caso del espionaje montado desde la administración porteña “lo mejor que les puede pasar” es que detrás haya “incapacidad y desgobierno”. El dirigente de Convergencia Federal cuestiona como nunca al macrismo: “No pueden tener una posición en el Congreso de la Nación y la contraria en la ciudad”.
–¿Por qué?
–Por una cuestión de responsabilidad. Si algo me autocritico es de haberlo ayudado a llegar a jefe de Gobierno. Y no tengo rencores, nada. Los episodios dan lugar a que uno sea implacable. Hemos martillado al gobierno nacional por el manejo de la publicidad oficial. La ley que salió de la Legislatura porteña sobre publicidad era muy razonable. ¿Qué hace Macri? La veta en los artículos cruciales. Lo gracioso es que sus diputados en el Congreso nacional proponen lo que fue vetado. No puede tener una posición en el Congreso y la contraria en la ciudad.
–¿Va contra los principios del PRO?
–A ver, he venido marcando las objeciones con cuidado: la suba de impuestos contradiciendo los compromisos, la complicidad con la ludopatía, el desconcierto frente a los programas de gobierno, la idea de que los gastos los va a pagar otro. La gran medida kirchnerista fue dejar de lado la responsabilidad fiscal. ¿Cuál fue la gran medida en la ciudad? ¡Dejar de lado también la responsabilidad fiscal! Me pareció un disparate querer modificar el Código Civil por el fallo de una jueza.
–¿Por el matrimonio gay?
–Modificar el Código Civil. Eso es lo central. Ese debate tiene que darse en el Congreso, y no por la ventana. Me pareció una contradicción enorme y escandalosa que de esa posición pasara a Posse.
–¿Posse le resultó muy de derecha?
–No hago una calificación sobre Posse. Pero no veo cómo puede ser congruente lo del Código Civil con Posse. Y el argumento es que se equivoca todo el tiempo con los nombramientos. Eso es muy grave. Los episodios de espionaje son de una gravedad extraordinaria. No sabemos si es solamente desgobierno o si es algo más delicado. Lo mejor que puede pasarles es que sea incapacidad. Las políticas para generar un cambio, la diferenciación con el gobierno nacional, todo eso no lo veo.
–¿Cómo vio el lanzamiento de la Metropolitana?
–Ahora se volvió a un programa más sensato que cuando, todos los meses, la anunciaban para el mes que seguía.
–¿Y la gestión de Esteban Bullrich?
–No quiero opinar hasta ver los hechos.
–¿Usted cree que puede ser mejor jefe de Gobierno que Macri?
–No le voy a dar título.
–En el Acuerdo Cívico hay una ruptura entre Cobos y Carrió...
–Tengo la sensación de que va a haber dos fuerzas alternativas. El justicialismo va a resolver su interna (las declaraciones de Reutemann son la clarinada para agruparse). Ojalá Reutemann prevalezca sobre Kirchner. Eso sería muy sano. Va a haber una alternativa a la izquierda, donde estarían Juez, Solanas, Sabbatella. Lo de los dos millones de dólares creo que los convenció de alejarse. Y esto de que hay que ser rico y estalinista... D’Elía dice que hay que ir a ver la lista de los que compraron dólares. ¡Si son todos ellos! ¡Son todos peronistas!
–Están también De Narváez, Macri...
–Por eso, todos peronistas. ¡El partido de la justicia social!
–Pero, ¿qué cree que va a pasar con el Acuerdo Cívico?
–Yo trabajo constructivamente. A lo mejor, no se da.
–¿A Carrió la ve trabajando constructivamente?
–Cada vez que me he reunido con Elisa, fuimos con planteos muy precisos, de programas. Lo último que hay que hablar es de las candidaturas.
–Si se rechaza el Fondo del Bicentenario, ¿de dónde salen los fondos?
–Del Presupuesto. Salvo que usted me diga que trucharon los números, que el Presupuesto es un bolazo y que ellos lo reconocen: “Somos unos canallas mentirosos, que burlamos a toda la sociedad y ahora queremos decir la verdad”. Bueno, ahí empezamos otra discusión. La forma de gobernar es muy trucha. En la historia argentina, a la idea de que uno se podía robar las reservas le llamaban gaucho banking. El Fondo del Bicentenario es un robo de las reservas, que son de los tenedores de pesos, no del Ejecutivo.
–El Gobierno plantea que se puede usar el excedente de reservas y destinar los otros fondos a cuestiones sociales.
–No existe tal cosa como las reservas excedentes. No jorobemos. Lo único que falta es que la ideología sea la contabilidad. ¡Es como la ley de gravedad! Sólo la Unión Soviética quiso inventar una nueva ciencia natural.
–¿Por qué?
–Por una cuestión de responsabilidad. Si algo me autocritico es de haberlo ayudado a llegar a jefe de Gobierno. Y no tengo rencores, nada. Los episodios dan lugar a que uno sea implacable. Hemos martillado al gobierno nacional por el manejo de la publicidad oficial. La ley que salió de la Legislatura porteña sobre publicidad era muy razonable. ¿Qué hace Macri? La veta en los artículos cruciales. Lo gracioso es que sus diputados en el Congreso nacional proponen lo que fue vetado. No puede tener una posición en el Congreso y la contraria en la ciudad.
–¿Va contra los principios del PRO?
–A ver, he venido marcando las objeciones con cuidado: la suba de impuestos contradiciendo los compromisos, la complicidad con la ludopatía, el desconcierto frente a los programas de gobierno, la idea de que los gastos los va a pagar otro. La gran medida kirchnerista fue dejar de lado la responsabilidad fiscal. ¿Cuál fue la gran medida en la ciudad? ¡Dejar de lado también la responsabilidad fiscal! Me pareció un disparate querer modificar el Código Civil por el fallo de una jueza.
–¿Por el matrimonio gay?
–Modificar el Código Civil. Eso es lo central. Ese debate tiene que darse en el Congreso, y no por la ventana. Me pareció una contradicción enorme y escandalosa que de esa posición pasara a Posse.
–¿Posse le resultó muy de derecha?
–No hago una calificación sobre Posse. Pero no veo cómo puede ser congruente lo del Código Civil con Posse. Y el argumento es que se equivoca todo el tiempo con los nombramientos. Eso es muy grave. Los episodios de espionaje son de una gravedad extraordinaria. No sabemos si es solamente desgobierno o si es algo más delicado. Lo mejor que puede pasarles es que sea incapacidad. Las políticas para generar un cambio, la diferenciación con el gobierno nacional, todo eso no lo veo.
–¿Cómo vio el lanzamiento de la Metropolitana?
–Ahora se volvió a un programa más sensato que cuando, todos los meses, la anunciaban para el mes que seguía.
–¿Y la gestión de Esteban Bullrich?
–No quiero opinar hasta ver los hechos.
–¿Usted cree que puede ser mejor jefe de Gobierno que Macri?
–No le voy a dar título.
–En el Acuerdo Cívico hay una ruptura entre Cobos y Carrió...
–Tengo la sensación de que va a haber dos fuerzas alternativas. El justicialismo va a resolver su interna (las declaraciones de Reutemann son la clarinada para agruparse). Ojalá Reutemann prevalezca sobre Kirchner. Eso sería muy sano. Va a haber una alternativa a la izquierda, donde estarían Juez, Solanas, Sabbatella. Lo de los dos millones de dólares creo que los convenció de alejarse. Y esto de que hay que ser rico y estalinista... D’Elía dice que hay que ir a ver la lista de los que compraron dólares. ¡Si son todos ellos! ¡Son todos peronistas!
–Están también De Narváez, Macri...
–Por eso, todos peronistas. ¡El partido de la justicia social!
–Pero, ¿qué cree que va a pasar con el Acuerdo Cívico?
–Yo trabajo constructivamente. A lo mejor, no se da.
–¿A Carrió la ve trabajando constructivamente?
–Cada vez que me he reunido con Elisa, fuimos con planteos muy precisos, de programas. Lo último que hay que hablar es de las candidaturas.
–Si se rechaza el Fondo del Bicentenario, ¿de dónde salen los fondos?
–Del Presupuesto. Salvo que usted me diga que trucharon los números, que el Presupuesto es un bolazo y que ellos lo reconocen: “Somos unos canallas mentirosos, que burlamos a toda la sociedad y ahora queremos decir la verdad”. Bueno, ahí empezamos otra discusión. La forma de gobernar es muy trucha. En la historia argentina, a la idea de que uno se podía robar las reservas le llamaban gaucho banking. El Fondo del Bicentenario es un robo de las reservas, que son de los tenedores de pesos, no del Ejecutivo.
–El Gobierno plantea que se puede usar el excedente de reservas y destinar los otros fondos a cuestiones sociales.
–No existe tal cosa como las reservas excedentes. No jorobemos. Lo único que falta es que la ideología sea la contabilidad. ¡Es como la ley de gravedad! Sólo la Unión Soviética quiso inventar una nueva ciencia natural.
Por Werner Pertor de Página 12
5 comentarios:
Hasta ahora, me parece Ud el más centrado , le confieso que este gobierno me produce mucho miedo.-Y la oposición es como una nebulosa.-Lo que si me queda claro es que ninguna de las dos partes, hablan del bien para los argentinos, sino de una pelea y de quien la va a ganar, nadie piensa en que sus equivocaciones producen en nosotros un malestar que arruina nuestras vidas.-Le hago una pregunta ¿es cierto que los Kirchner cometieron todos esos ilicitos? me gustaria conocer su opinion.-Un abrazo
SE VIENE LOPEZ MURPHY, JEFE DE GOBIERNO PORTEÑO ?
PABLO.
Bs As
Ricardo, muy buena esta nota, estoy en todo de acuerdo con ud. El macrismo es un fraude total. Que horror las inundaciones, los botes, gente en gomones...
Saludos!!
Hola Ricardo,
María Sáenz Quesada hoy en La Nación dice muchas cosas idénticas a las que dice ud.
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1235733
Contundente.
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