El peligro de atentar contra la libertad

El propósito fundamental del proyecto de la ley de regulación de servicios de comunicación audiovisual es poner una mordaza a la prensa libre. Eso inspira el espíritu de la norma y el afán de no reparar en medios para lograr su sanción. En ese aspecto, vamos a señalar algunas cuestiones importantes por considerar.

La primera y la más significativa es el tratamiento del proyecto de ley. Se vulneraron en la Cámara de Diputados de la Nación todos los procedimientos habidos y por haber, en términos de respetar las normas que llevan a la sanción de la ley. Se perdió el debido proceso, y eso es esencial en lo que hace a la credibilidad y pulcritud de las normas que emanan del cuerpo legislativo.

Esa pérdida de los procedimientos, esa vulneración de la información y de la capacidad de hacer comentarios y aportes por parte de los integrantes de la Cámara de Diputados desde ya es un baldón gravísimo para la eficacia de la ley y aun para la propia defensa de su constitucionalidad.

La clave en una votación tiene que ver con los procedimientos. Si los procedimientos no se respetan, si se usa la técnica del tumulto, si se lleva por delante a los legisladores opositores, todo lo demás está viciado, todo el argumento doctrinario e ideológico se pierde en la arbitrariedad, en la impotencia y en la patota. 

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